Tenía que lavar la bici y como llevaba casco y sillín nuevo no he podido reprimir las ganas de salir a ver qué tiempo hacía.
Menos mal que todavía existe gente tan loca como yo y ahí se presenta el Gran Josep que venía desde Sitges, solo.
Menos mal que todavía existe gente tan loca como yo y ahí se presenta el Gran Josep que venía desde Sitges, solo.
Para poniente estaba muy negro así que chispeando nos hemos tirao por la carretera del Casino hacia Sant Pere a un sitio (quedará en el misterio) donde hacen unos huevos fritos...