La etapa de ayer fue bastante dura. Me preparé durante toda la semana para dejar el pabellón bien alto y os puedo decir que si, q así fué.
Después de comer hacia las dos de la tarde en un restaurant de moda muy bueno con una carta de vinos increible... con una botella de Priorato de 500€!!! Seguimos hasta la noche de cubata en cubata, cola con ron Maria Teresa, q acompañaba muy bien y entraba fresquito, gintonics, un par de rebujitos (manzanilla con Seven Up), chupito de Four Rouses y hasta un Fraiangélico.
Decir q los he tumbado, tenía el día, he aguantado en el pelotón bien pero ya al final, cuando estaba de veras bien-bien la señora me ha dicho, ala majo, pa´casa q ya estas bien cocido ¿YOOO? Si voy muy bien... en fin, q me han cortao el rollo. (Menos mal, si no me veo abrazao a cualquier neozelandés bebiendo don Simón toda la noche)
Una mezcla increible que no me ha dejado resaca.
(Una semana sin bici y ya me subo por las paredes. Espero reiniciar los entrenos pronto o me paso al alcohol directamente)
